DIVAGANDO ENTRE DOS BOSQUES ENCANTADOS

Moraleja de los Dos Bosques Encantados que existen en la Tierra
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"Si te pierdes en lo profundo del Bosque de la Maldad, solo 3 luces te podrán guiar:
1. Tu corazón, tus vivencias y los errores comúnes de quién se perdió en el camino para que con experiencia y fortaleza halles el camino de salida, con la sonrisa y la autoestima de saber que mediante tal proceso, puedes llegar a reconducir a gente que como tú se perdió en tal camino y necesita ver otra luz, la del Bosque de la Bondad.

2. El Guía siempre atento, el que está siempre en la frontera entre el bien y el mal conduciendo a la gente perdida, dando su luz, su vida y su atención y oficio a tal menester.

3. La realidad de que hay un Bosque al otro lado, y que igual que te perdiste en este puedes salir y encontrarte con el otro sin más, pues igual que una causa, destello o azar te hizo meditar y adentrarte en este Bosque, posible que la misma te lleve de vuelta al otro.

Lo cierto es que cada cuál hace de su casa el lugar más acogedor posible, y en estas idas y venidas el Cielo y el Infierno se unen en la Tierra como uno solo, la diferencia la marcan los habitantes permanentes de ambos lados (espíritus malignos y espíritus bondadosos), los demás hasta que no encontremos nuestro hogar somos como viajantes, sin brújula con un corazón que late más fuerte cuando nacemos hacía el Bosque de la Bondad, pero conforme rehacemos nuestra personalidad y dominamos nuestros pensamientos podemos hacerle perder ese sentido de orientación, desarrollarlo para que marque lo contrario o simplemente luchar porque nunca deje de marcar aquello que todo el mundo necesita encontrar."

El problema de la Teoría Moral es que cuando menos personas lo apoyen menos fuerza tendrá y menos eficaz será, en el fondo el que está en el Bosque de la Maldad intentará hacerte ver que el mundo es así y que debes reaccionar como él y si es peor pues mucho mejor.

Cuando alguien venga con el espíritu cabreado, lleno de odio y de ira, blasfemando y con ganas de herir, bien pudieras hacer tres cosas:

1.- Defenderte con un espíritu alegre, lleno de amor y de paz, alabando y con ganas de ayudar y ver como se desarrolla la pelea interna.

2.- Huir si no tienes fuerzas, para descansar y que puedas combatir si se presenta otra vez la ocasión, teniendo en cuenta que cuanto mayor sea el adversario, más deberás entrenar tú espíritu para llegar con fuerzas iguales o mayores a tal batalla.

3.- Buscar la ayuda de un ser con espíritu igual o superior al que te ataca y calmarlo entre ambos.

*** No Hablo de Guerras ni de matar ni nada de eso, solo de la lucha interna de los espíritus y las mentes que están dominadas o invadidas por tales sentimientos, realmente soy pacifista, aún así siendo realista no se cuál es el camino que Dios nos susurra y quiere para combatir el mal representado con armas de destrucción con la finalidad de aniquilar oposición alguna.

Tenemos miedo a la guerra y a lo que está genera y no vemos la realidad de lo ineludible? o cuando tenemos miedo a lo que nos rodea no encontramos más palabra y más solución que gritar: A LAS ARMASSS!!!?.

Bien esto de Pacifismo o Guerra es un tema delicado y bien puede dar toda una vida de debate, la Historia habla por sí sola.

Si dos no quieren no discuten.
si uno no quiere, se acabo el debate.

El problema es que cuando uno no quiere luchar con armas, le masacran.
Y el metaproblema de esta acción es que el malo, el culpable, el agresor es el que lucha contra alguien indefenso.

"Entre dos seres racionales, el que usa como recurso la Violencia es el que verdaderamente pierde la batalla dialéctica y la razón para obrar como pensaba"
By Sir Cebollo (Algo parecido dijo mi admirado M.Ghandi pero al no recordar sus frase exacta me inclino desde mi punto de vista Moral y mi corazón a expresar tal frase con humildad y sin otro fin que unir Moral y Paz en una sola frase.)

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Si ves que no tienes fuerzas no es de cobardes huir o estar detrás de quién tenga igual o más espíritu que el acechador pues solo estas salvando a tu espíritu de no volverte como él.

Si ves que poco a poco el estado de esa persona enfadada te domina y empiezas a pensar como él, yo huiría y buscaría refugio pues nada más puedes hacer contra esa persona.

Lo mejor es luchar mientras haya fuerzas o posibilidad de vencer o sosegar para llevarle a un espíritu calmado o neutro, o escapar y que en su soledad recapacite el que uno haya querido seguir otro camino distinto al de él, pues con suerte podría calmarse, y si explota no es obligación moral estar cerca sino puedes pararlo al menos eso creo yo, solo sería bueno estar para cuando puedas unir sus cachitos, su espíritu, su mente, su cuerpo y recomponerlo con amor y cuidados.

Quizás nadie te asegure que de la unión salga un ser bondadoso, pero al menos sabes que haciendo lo contrario si fomentas tal posibilidad no solo en él, sino en el hacedor del mismo, el verdugo.


"No hay trabajo solo con los malos, también con las víctimas que reciben tal daño interior que quizás exploten imitando a sus verdugos aún con más saña que el mismo.
Los cuerpos son un vehículo y no un camino para llegar a tu Destino, para los que creen en el ALMA y el ESPÍRITU pienso que así será.

No hay que luchar contra el Ser Humano, Aniquilarlo.

Hay que luchar contra los ideales egoistas y malvados, no altruistas ni bondadosos, contra aquellos que pretenden que pensemos como ellos albergando miedo, dudas y temor por todo lo desconocido, pues el fin del MAL es que todos hagamos afín a nuestro corazón y a nuestro espíritu de tal herencia de odio, ira y miedo contenidos, usándonos de puros vehículos para tal fin.

El Buen ejemplo de un Buen espíritu perdura toda la vida generaciones tras generaciones, dudo que nadie sepa de Jesús y sino es de él de alguien celebre a través de los tiempos cuyo recuerdo perdure en los corazones.

Matando a la persona malvada no matas el espíritu malvado que se generó y dió esencia de su Poder para MAL ejemplo, lo más seguro es que con su muerte agrande a otros a albergar tal poder y les haga intentar seguir su camino aún con más fuerza.

Se trata simple y llanamente de curar, de enseñar el camino hacia el bien, hacia una mente sana y equilibrada, hacía un espíritu en paz y en armonia con todo su ser.

Cuyo poder no es su causa y esencia como pasa con los espíritus malvados, sino que el poder del Bien es la consecuencia misma y el tesoro que se entrega a los iluminados en tal camino.


El camino del MAL está basado en la búsqueda del PODER casi exclusivamente, y es ahí cuando una persona que se piensa destinada a grandes cosas o simplemente que presume de ser muy ambicioso, si fracasa en sus tentativas de conseguirlo a las buenas puede acabar degenerando en pensar que EL FIN JUSTIFIQUE LOS MEDIOS y que no importa el CAMINO sino el RESULTADO, pues sin ese RESULTADO el piensa que NO SERÁ FELIZ NI PLENO, ni sirve de nada el esfuerzo si nada se consigue.

El camino del Bien consiste en esforzarse para levantarse cada vez con más fuerzas y más ánimos para desempeñar tus buenas labores del día a día.

EL esfuerzo máximo, el sudor de nuestra frente como viene puesto en la Biblia, es nuestro mayor tesoro en está vida en la Tierra, sacar lo máximo y mejor de nosotros, Dios perdona a los caídos, desvíados y cansados mientras en pos de su arrepentimiento se vuelvan a poner de pie y vuelvan a luchar por labrarse un buen camino. Todos somos únicos y parte a la vez de todos en nuestro camino hacia el BIEN.


El Camino del mal, consiste más bien en conseguir el Poder necesario para que todos se arrodillen ante tí, nadie se levante y tú nunca te des por caído o vencido pues eso es la mayor deshonra a tal Poder. No existe el perdón ni la misericordia, no existen los fracasos, solo el Poder del más fuerte en el que solo uno puede ser el Rey, pues eliminan hasta a la propia competencia.


Salud, Trabajo y Amor a todos.

Postdata: Sí, lo reconozco, puedo escribir mejor y con más fundamento y llamadas a otros libre y bien pensadores.

Pero hoy no escribí con una mente técnica sino con un corazón y unos ideales que vuelan impulsivamente para que hacer el Bien más allá de lo condicional de nuestros estados, de como estemos ahora y de lo que podamos ofrecer, todo es mejor, pasito a pasito, con buena letra. Pues lo que rápido sube, bien poco tarda en caer.